En un mundo cada vez más consciente del impacto ambiental de nuestras acciones, el compromiso con la sostenibilidad se ha convertido en una prioridad para muchas empresas. Por ello, en línea con los objetivos establecidos por la Unión Europea en su agenda 2030 y la Estrategia Española de Economía Circular: “España Circular 2030” sobre la disminución de generación de residuos, en Llopis Servicios Ambientales, acabamos de lanzar una nueva certificación de calidad denominada «Objetivo Cero Residuos» (de ahora en adelante OC-residuos).

La puesta en marcha de esta iniciativa se ha llevado a cabo de la mano de Garantía Cámara como entidad certificadora. Con ella buscamos respaldar a las empresas comprometidas con el medio ambiente ayudándolas a conseguir sus objetivos establecidos.

¿Qué es la Certificación de Calidad OC-residuos?

Se trata de una herramienta diseñada para reconocer y promover a las empresas que se comprometen a erradicar el vertido de residuos en vertederos.

El objeto de este referencial es evaluar, constatar y validar que se aplican los requisitos y especificaciones de minimización de residuos. También se busca incorporar la exigencia que conlleva la certificación como un elemento de decisión estratégica en las organizaciones a la hora de planificar sus actuaciones asociadas a la sostenibilidad, el buen uso y aprovechamiento de los recursos.

Es una forma de ayudar a las empresas a integrar prácticas sostenibles donde se fomente la recogida selectiva, se apliquen medidas para reducir la cantidad de residuos y los impactos negativos que estos generan, y además se ponga en valor la reutilización.

¿Por qué hay que gestionar los residuos?

El factor principal que hace ineludible esta cuestión en las empresas es que la norma nos obliga. Este 2023 ha llegado cargado de legislación en materia de sostenibilidad y un tipo impositivo que grava a las organizaciones que tienen como destino final de los residuos generados en sus centros de trabajo, el vertedero. Si quieres saber más, te hablamos sobre esta normativa aquí.

En España tenemos un serio problema con los residuos; la tasa de reciclaje estipulada por Bruselas para 2020 era del 50%; a día de hoy nuestro país se aproxima, aunque sin alcanzar, el 40%. Todo ello con una meta para 2030 fijada en el 60%. Tenemos por delante un reto que no alcanzaremos sin el trabajo y el compromiso de las empresas de avanzar en la transición hacia la circularidad.

También encontramos razones en la tendencia de los flujos financieros que se movilizan cada vez más hacia inversiones sostenibles. Los clientes y stakeholders, en general, lo demandan y, por supuesto, por responsabilidad social y medioambiental.

¿Cómo implementarlo en mi empresa?

Contamos con dos modalidades de implantación del certificado: la primera, basada en el análisis y ratificación del cumplimiento de los requisitos que exige la norma y el propio sello. La segunda hace referencia a un programa de acompañamiento personalizado en el proceso de certificación, asesoramiento, elaboración de Planes de Minimización y orientación para la valorización y disminución de los residuos generados.

En cualquier caso, la certificación establece unos criterios de partida que se engloban en el concepto de ‘Gestión Responsable’ los cuales son estudiados en un proceso de evaluación y auditoría para verificar su cumplimiento. Este punto puede parecer evidente, pero no siempre se cumple. Es importante formar a las empresas y hacer talleres en aquellos casos en los que se carece de información específica en materia de gestión de residuos.

Además de auditar y verificar si se cumple o no, esa gestión responsable, se debe dar el cumplimiento de los parámetros de destino de residuos producidos a instalación de vertido -vertederos- representados en la siguiente tabla.

Los niveles de reconocimiento otorgados a las empresas una vez finalizado el proceso de auditoría son los siguientes: “bien”, “notable”, “sobresaliente” y de “excelencia”. Cualquiera de ellos, sirve para poner de manifiesto ese compromiso ambiental y de minimización de residuos que adquieren las empresas al iniciar el proceso de certificación.

Por su parte, la renovación anual de este sello de calidad promueve la mejora y el cumplimiento del plan de minimización y valorización diseñado durante el proceso.

Beneficios de la Certificación OC-residuos

Además de ser una herramienta eficaz que elimina y/o reduce las barreras de entrada a nuevos mercados que son claves en la economía circular:

1. Económicos: Supone un ahorro de costes tanto para el productor de residuos como para su gestor.
2. Sociales: Mejora la salud de las personas y beneficia a la imagen corporativa de las empresas.
3. Ambientales: Optimiza la utilización de los recursos naturales y reduce los impactos negativos

En definitiva…

Al alentar a las empresas a adoptar prácticas más sostenibles, esta certificación juega un papel crucial en la protección del medio ambiente y en la construcción de un futuro más verde para las generaciones venideras.

El éxito de esta iniciativa depende de todos.

Si te interesa, puedes localizarnos en los datos de contactos facilitados en nuestra web.
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